Una mirada al futuro.





Nunca se frena el progreso,
como torrente imparable se desplaza
sin perseguir fin alguno
más allá del propio avance.

No es bueno ni malo en esencia,
no abriga esperanzas ni marca objetivos,
sólo se deja ir pendiente abajo
en virtud al designio de poderes superiores.

¿Qué hacer, pues, con el futuro?
¿Qué utilidad conferirle? ¿Qué proceso encomendarle?
Es el fin que le otorguemos
el que le ofrece sentido,
siendo virtud o defecto
en función de quién lo acate.


Comentarios

  1. En él se encuentran las respuestas de muchos desvelos, da lugar a inesperados instantes y es guardian de nuestro ahora, temido o anhelado segun nos espere, mas siempre por todos cuestionado.

    Yo aprendí su crueldad cuando ingenua lo ansiaba y su sosiego en la paciente llegada y hoy ya no le pregunto cuando esté por llegar...

    Que llegue es lo que deseo, que tenga fuerza para afrontarlo e ilusión para gozarlo...

    Ojala sea mi futuro dulce como mi presente...a Tu lado...a Tus pies.

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    Respuestas
    1. Me atrevería a afirmar que no deben de ir muy desencaminados tus pasos, pues son bastantes las voces que sostienen que es en el presente donde se construye el futuro.

      Un beso y un azote, mi dulce y "precursora" sierva.

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