Trascendiendo lo visible.
En la traslúcida
quietud,
enhebrada de
intenciones,
se consigue distinguir
el tono de muchas
cosas
que vemos sin ser
palpables
entre cortinas
señuelo.
Retinas que
desentrañan
lo que hay de bueno y
de malo
en el casual
laberinto
de las pasiones mundanas.
Oportuna coincidencia
que nos remite al
principio
de todo cuanto nos
arma,
como figuras que
somos,
mientras otorga los
tantos
en un tablero de
enigmas.
Hoy, en este instante, estas palabras hacen un eco impresionante... quedarse quieto, en silencio, un poco apartado, al lado del camino, y observar... como si fuera todo una gran obra de teatro, y uno sólo un simple espectador y no más un protagonista... y ahí, desde allí lo ves todo...
ResponderEliminar...aunque a veces ver duela.
Tentadores besos.
En ocasiones quisiera cerrar los ojos y no ver nada mas allá, saber que lo único cierto es aquello que conozco y que fuera no se esconde nada ni nadie, pero a la vez, sé que en otras ocasiones en las que he deseado no ver me he perdido mucho y al enfrentarme a aquello que en verdad hay me he descubierto a mi misma.
ResponderEliminarImagino que se trata de ir viendo, de desgranar y quedarnos con lo que en verdad nos aporte entre todo cuanto hay.
Seguiré pensando en ello...
Besines dulces
A Tus pies