Sweet gravity.





Hay poderes invisibles,
que nos vencen de antemano,
frente a los cuales la lucha
se manifiesta inviable.
Tal derrota no es deshonra
pues excede lo factible
y a la razón no se aplaca
con hipérboles ruinosas.

Algunos de ellos, no obstante,
merecen ser contemplados
como una causa oportuna,
provechosa y hasta afable,
puesto que ofertan ventajas
en virtud a la exigencia
derivada de su influjo
y el orden que proporcionan.

Despejados los supuestos
y asimiladas las bases,
lo que ayer era misterio,
hoy se sabe cotidiano.
Y aunque no cese su influjo,
es factor ya conocido
sin dobleces en su trazo
ni segundas intenciones.

Estáticos en el limbo
del olvido pretendido,
arropados por potencias
con un origen sagrado,
flotamos como el aliento
de la épica obtenida
tras vencer a los demonios
que sabemos interiores.




Comentarios

  1. Todo eso para estar pensando un rato largo...

    Buena tarde, Señor.

    ResponderEliminar
  2. Muchas veces nuestras experiencias, nuestras expectativas, nuestro modo de entender el medio hace que creemos un cierto método y es a base de experiencia como vamos modificando nuestro hacer.

    Si tenemos la fortuna de encontrarnos nuestro en nuestro camino a quien acompañe nuestro objetivo el camino será el del aprendizaje mas quien por desgracia hierre sus pasos poseera otro aprendizaje que puede no hacerle llegar a buen puerto.

    Demonios internos, temores, aciertos y errores, pasos en soledad y sendas en compañía, un cúmulo de fortunas y aventuras que llevan nos llevan a un determinado punto.

    Pero si contra algo no podemos luchar es contra nuestro sino interno, sobre esa fuerza a la que estamos irremediablemente expuestos y que, si la aceptamos, siempre que a nadie dañe, podremos disfrutar ya sin tensiones de sus favores.

    Disculpa mis reflexiones, sobretodo si se desvían del origen de tu texto, pero mis letras fluyen a través de la inspiración que me conceden.

    Besines dulces
    A Tus pies

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares