No puedo evitar pensar en quien se lo ha preparado, quien observa desde ese rincón preferido manteniendo el anonimato y dejando que ella le ofrezca su placer. Le imagino diciéndole que se lo entregue, pidiéndole como y cuando debe hacerlo y dándole ese toque único al selfservice.
No puedo evitar pensar en quien se lo ha preparado, quien observa desde ese rincón preferido manteniendo el anonimato y dejando que ella le ofrezca su placer.
ResponderEliminarLe imagino diciéndole que se lo entregue, pidiéndole como y cuando debe hacerlo y dándole ese toque único al selfservice.
Besines dulces
A Tus pies