Año de nieves...




Por mucho que su aparición pueda llegar a generarnos más de un trastorno, nunca deberíamos abjurar de la llegada del níveo elemento cuando viene a ocupar la parcela que los ciclos naturales le tienen asignada. A él le debemos las reservas de agua que tan necesarias nos van a resultar durante el resto del año, contribuye a eliminar los elementos nocivos presentes en el aire que inhalamos y la tierra en que vivimos, evita la proliferación de plagas y; ya en un plano más estético; dibuja paisajes inmaculados e inéditos.


De ponerle un pero, lo único que yo le reprocharía es su nula capacidad para reducir un punto la temperatura de tanta mente sobrecalentada como parece proliferar en estos tiempos. Por desgracia, a pesar de lo que sabiamente intenta inculcarnos el refranero popular, determinados “bienes”, siempre van a resultar escasos.

Comentarios

  1. Dicen que ***Año de nieve es año de bienes*** ójala así sea, y que siga nevando para que se extienda la felicidad, tanta necesaria.

    Feliz tarde, Caballero.

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  2. Razón no te falta respecto a la bajada de temperatura de ciertas mentes. Te felicito por tu tacto.

    Mil besitos y feliz finde.

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