Ciudad de dos.
No es algo que me haya cogido por
sorpresa, pero acontecimientos recientes han venido a demostrarme que
determinadas fortalezas no guardan demasiada relación con el número de individuos
que le secunden a uno y que un exceso de compañía puede llegar a convertirse
más en un inconveniente que en una ventaja.
Quiero recalcar el hecho de que
no he sido objeto de ningún tipo de súbita revelación de origen místico ni he
sufrido un repentino acceso de alienación irreversible. No, no se trata de nada
de eso. No obstante, he sentido la necesidad de compartir con vosotros
esta reflexión por si a alguno le resultaba de utilidad, pues, en
ocasiones, una multitud puede llegar a resultar una entelequia insulsa, vacía,
solitaria y más monocromática de lo que
nos sentimos inclinados a creer. En cambio, en el seno de un humilde y, relativamente, accesible binomio puede llegar a vislumbrarse toda una batería de
matices; un curioso y excitante maridaje donde confluyen profundos sentimientos
de solidaridad, sacrificio y abnegación entre dos personas que muy pocas
colectividades son capaces de emular.
No siempre lo más extenso es lo
que más alberga. No siempre lo más sencillo resulta ser lo más simple. Y…,
fuera de la estricta matemática, uno y uno pueden llegar a ser mucho más que
dos.
Me encuentro totalmente de acuerdo con esta reflexión. Sólo en las matemáticas, en un mundo abstracto, uno más uno es dos; en biología ya el resultado puede ser muy diferente... y el ser humano, es todo menos que abstracto.
ResponderEliminarComo siempre, un placer visitar esta ciudad, sobre todo en la tranquilidad de la noche.
Saludos.
Lo realmente importante, para mí, es que sea visible, que se de luz a aquello que no tiene aparente aprecio, por ser mínimo, detalles, apenas unos gestos que le confieren así grandeza.
ResponderEliminarTu me has enseñado, mi Señor, que aquello que poseemos no debe despreciarse, por pequeño que sea, sino que debe ser entregado a quien lo desee poseer.
Solidaridad, sacrificio y abnegación que dejan de serlo cuando el deseo los cobija y afloran sin necesidad de ser llamados.
Eres un ejemplo para mí.
Gracias por todo mi Señor.
T'estimo molt
A Tus pies
Calidad antes que cantidad...
ResponderEliminarHay una cita en la red que me gusta mucho:
"estar rodeado de tanta gente y sentirse solo"
Por eso ... dos personas pueden ser mucho porque al compartir... se multiplican.
Mil besitos.