Haciéndome el loco.




Dejo la línea ocupada
sin ocuparme de ella
ajeno al crepitar de esa señal,
confusa y vacía,
que llega a través del hilo
de unos usos petulantes.

No quiero escuchar más
su interferencia afectada
ni sus mensajes tramposos
insertados al efecto.
Quiero huir de sus influjos,
salirme por la tangente,
sin exponerme al contagio
de sus nocivos sentidos.

Poco a poco, me sumerjo,
mientras me dejo vestir
de pura melancolía
adornada con sonidos
de corte psicodélico
que se asoman al pasado.

Ya estoy allí; lejos, a salvo;
y las voces que me llaman
siguen empecinadas
en creerme disponible
y presto a salvaguardarlas
de sus propias tropelías
nacidas en el delirio
de creerse invulnerables.

Ya no acepto más llamadas
cuyo cobro es revertido,
ya no hay crédito a esas chanzas
de labios envenenados,
pues la línea está ocupada
pero a mí me da lo mismo.



Comentarios

  1. Unas letras un tanto diferentes a lo que estoy habituada a leer de usted. Interpreto hastío, hartazgo... En ocasiones, no hay mejor remedio que ser indiferente a antes ciertas circunstancias.
    Mis afectuosos saludos, Caballero, y muy buen día tenga.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El cansancio que desprenden mis palabras no puede, ni debe, obviarse.

      Aunque también forma parte de la vida de todos y cada uno de nosotros, da rabia convertirse en el blanco de las frustraciones que arrastran algunos.

      No obstante, cada cual a de hacer frente a sus propias luchas sin renunciar a sus principios ni claudicar a la mínima dificultad.

      Gracias por el detalle de tus palabras.

      Recoge mis afectuosos y cómplices saludos.

      Eliminar
  2. No siempre, mi Señor, debemos atender. No siempre se merece, y puede hacer que dejemos de disfrutar de los pequeños detalles y añada un estrés extra que nada nos aporta.

    Incluso cuando creemos en la responsabilidad, cuando tratamos de obrar por un bien, ya sea a corto o largo plazo, no siempre dependerá de nuestros esfuerzos cuando otros ponen el empeño en el polo opuesto.

    Remar contra corriente no sirve, apoyar a quien desea hundirse provoca el ahogarse juntos.

    Recuerda siempre que has hecho todo cuanto podías, y más, en cada instante. Quédate tranquilo, disfruta de tanto como tienes por ofrecer a quien si lo valora y continúa siendo Tu mismo.

    Escúchate sólo a Ti. Sabes que haces bien.

    Salga o no como deseas, aunque no sirva para mucho, a mi me tienes y lucharemos unidos.

    T'estimo molt mi Señor
    Besines dulces
    A Tus pies

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tus palabras me infunden ánimo y me llenan de orgullo. Orgullo por haber sido capaz de demostrarte la fuerza de mis valores, el alcance de mi tesón y la nobleza que subyace en cada una de mis acciones.

      Sé que dicho así suena como cierta especie de autobombo (y es posible que haya pecado de cierta soberbia al exponerlo de este modo), pero mi reflejo en tus ojos no deja lugar a demasiadas dudas y me pregunto... ¿dónde radica la diferencia? ¿En el original de esa imagen o estará en el propio espejo?

      Un beso y un azote mi dulce, y "favorecedora", sierva.

      Eliminar
    2. Creo mi Señor que la imagen que se refleja es la que hay en realidad pero en ocasiones, hay espejos que no muestran la verdad, distorsionan a su antojo y muestran al mundo su verdad, que ya no lo es.

      Besines dulces
      A Tus pies

      Eliminar
    3. Un símil deslizado con estudiada maestría. No queda otra que rendirse a la evidencia asentada en tu dialéctica.

      Un beso y un azote mi dulce, y "resolutiva", sierva.

      Eliminar
  3. Un Basta a tiempo, o un solo tiempo basta para sentir dónde está la línea que nos haga reflexionar.

    Diferente e interesante Poema, Como un pensamiento en voz alta.

    Mil besitos y feliz día.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Más que reflexión... constatación. Ahora bien: la realidad está ahí para ser enfrentada y no ignorada.

      Saludos de lo más cordiales y afectuosos.

      Eliminar
  4. Unas letras que me llegan y tocan de cerca. Qué difícil es a veces decir "hasta aquí". Y no es falta de amor, de aprecio o de consideración; es un simple acto de supervivencia.
    Tal vez para cada uno de nosotros haya pocos seres por los cuales ese límite no existe; por los cuales estamos dispuestos a llegar al infierno y volver, si hace falta... por el resto, que la línea este ocupada y que a uno ya no le importe.

    Un beso.

    (P.D.: he leído tu interés y deseo por la situación que se está viviendo por estos lares... te agradezco, y aclaro que estoy bien, un poco preocupada y algo convulsionada en ritmos y rutinas, pero nada grave y a lo que no se le pueda hacer frente 😉... vuelvo a agradecerte y te dejo otro beso.)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Se nota que comprendes a la perfección aquello a lo que me refiero y que, por presentarse de las formas más variadas y enrevesadas que uno pueda imaginarse, no deja de presentar siempre su ponzoñoso trasfondo.

      Un fortísimo abrazo.

      (P.D.: Pues..., como ya te habrás enterado, como somos unos egoístas envidiosos que no queremos ser menos que nadie, ya estamos más o menos igual que vosotros, así que... como suele decirse en estos casos: "Valor y al toro".

      Ánimo y cuidate un montonazo.)

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares