La vida es caprichosa y, en ocasiones, nos concede lo que siempre habíamos deseado justo cuando creemos que ya no sucederá, quizás en el momento que parece menos oportuno.
Es en esos instantes donde debes dejar que te sorprenda, apostar por la posibilidad que puede ser maravillosa y disfrutar de cada instante que se te ha regalado.
Creo, y espero no equivocarme, que desde ese increíble tropiezo que mencionas he tratado de sacar todo el partido y de convencerte día a día de que sí era posible, de que lo conocido no tiene porque ser así y quep puede que alguien venga a demostrar que lo que soñamos un día existe.
Trabajo y deseo para hacer que nuestro proyecto de vida siga hacia adelante.
Mi ahora y, deseo, mi vida entera a Tus pies, junto a Ti.
No cabe duda de que nada nos llega sin algo de trabajo por nuestra parte, pero... eso no es obstáculo para aprovechar determinados "tropiezos" en nuestro propio beneficio.
Además, lo inesperado, muchas veces, trae aparejado un plus a nuestras pretensiones.
En ocasiones, creemos que son los pies los que caminan. Erramos, es eso que unos llaman destino y otros libre albedrío pero, que sea lo que sea, nos une. Feliz semana, Caballero. Mi sonrisa :-)
La vida es caprichosa y, en ocasiones, nos concede lo que siempre habíamos deseado justo cuando creemos que ya no sucederá, quizás en el momento que parece menos oportuno.
ResponderEliminarEs en esos instantes donde debes dejar que te sorprenda, apostar por la posibilidad que puede ser maravillosa y disfrutar de cada instante que se te ha regalado.
Creo, y espero no equivocarme, que desde ese increíble tropiezo que mencionas he tratado de sacar todo el partido y de convencerte día a día de que sí era posible, de que lo conocido no tiene porque ser así y quep puede que alguien venga a demostrar que lo que soñamos un día existe.
Trabajo y deseo para hacer que nuestro proyecto de vida siga hacia adelante.
Mi ahora y, deseo, mi vida entera a Tus pies, junto a Ti.
Besines dulces
T'estimo molt
A Tus pies
No cabe duda de que nada nos llega sin algo de trabajo por nuestra parte, pero... eso no es obstáculo para aprovechar determinados "tropiezos" en nuestro propio beneficio.
EliminarAdemás, lo inesperado, muchas veces, trae aparejado un plus a nuestras pretensiones.
Un beso y un azote mi dulce, y "atenta", sierva.
En ocasiones, creemos que son los pies los que caminan. Erramos, es eso que unos llaman destino y otros libre albedrío pero, que sea lo que sea, nos une.
ResponderEliminarFeliz semana, Caballero.
Mi sonrisa :-)
Ah, muchísimas gracias por permitirme tomar la imagen de aquel post anterior :-)
EliminarA mi me gusta pensar que se trata de una prueba irrefutable de que no todos los "accidentes" han de ser necesariamente malos.
EliminarY..., por cierto, no sé si accidentalmente o no, pero puedes tomar prestado de aquí todo cuanto sirva como incentivo a tu particular inspiración.
Recibe un afectuoso saludo.
Le llamamos pies al destino... eufemismos terrenales.
ResponderEliminarMil besitos y feliz semana.
Las palabras, como casi todo, quedan sujetas a la interpretación que queramos darles.
EliminarSaludos eufemísticos.