Lecciones de música.
Como en cierta ocasión dijo el
gran Luciano Pavarotti: “Intentar aprender sobre música leyendo únicamente
libros teóricos sería como pretender hacer el amor por correo”. En algo
así debían de estar pensando esta semana los integrantes de la ludoteca a tenor
de la propuesta que, en esta ocasión, han decidido ofrecernos.
Ahora que en este hemisferio la
luz de los días se va tornando más y más mortecina, que las nubes preñadas de
lluvia migran de nuevo a estas latitudes y las noches comienza a sentirse frías
y lánguidas, todo parece invitar a recogerse y dedicarse a alguna actividad
que, aun siendo instructiva a la par que entretenida, pueda realizarse al
abrigo de las inclemencias climatológicas.
La música siempre ha constituido
un estímulo para la mente y permite confeccionar un amplio abanico de paisajes
sonoros, independientemente de la estación en que nos encontremos. Así es como
nuestros amigos de la “ludo” se han
puesto manos a la obra lanzándose a
descubrir qué tipo de armonías son capaces de crear; aunque, claro, siempre
bajo esa óptica tan particular a la que ya nos tiene acostumbrados (¿Quién
sabe? Tal vez estén a las puestas de dar a conocer un nuevo estilo musical).
Sin duda que cada cual tendrá sus
preferencias en el momento de escoger un determinado instrumento para iniciarse
en este oficio tan creativo y gratificante. En tal sentido, cuando me han preguntado por cuál
de ellos me decantaría yo de aceptar su desafío…, bueno, la patria chica de cada
uno siempre está presente y ejerce su influencia en infinidad de cuestiones,
así que, en el momento de responder, de mis labios ha surgido instintivamente
una única palabra: “gaita”. Esto, en
un primer momento, pareció dejarles un tanto descolocados, pero al cabo de unos
instantes ya hallaron el modo de llevárselo a su terreno y de dar un nuevo
significado a la expresión: “templando gaitas”.
Queda en vuestras manos seguir su
ejemplo o tomar partido por formas más convencionales de dar salida a vuestras
inquietudes melódicas.
Que tengáis todos un feliz y acompasado
finde.
Joooooooo....por eso se reian tanto cuando les dije que mi instrumento preferido era mi propia garganta y que tenia que cuidarla mucho y tenerla siempre a punto....
ResponderEliminarYo los matoooooooo!!!!;)
Besines dulces
A Tus pies
Ya te lo he advertido en varias ocasiones: no te fíes demasiado de las intenciones de la "gente lúdica"; saben más de lo que aparentan y suelen esconder sus verdaderos propósitos.
EliminarUn beso y un azote, mi dulce y desengañada sierva.