Castigos
En cierta ocasión, conversando con dánae, me planteo la posibilidad de crear un hilo que versara sobre mis opiniones respecto al castigo dentro del entorno bdsm. Ya tenía pensado ir enumerando algunas de las prácticas más extendidas dentro de nuestro mundo, pero me parece muy buena idea plasmar, a modo de introducción, mis reflexiones respecto a este tema sin pararme a definir en particular ninguna de las muchas formas de penitencia que existen.
Ya he comentado en otro sitio que no soy muy proclive al uso del término “castigo” dentro de nuestra particular disciplina, ya que, parece llevar aparejado cierto grado de rencor y de revancha cuando se aplica normalmente. Pensaréis que soy un poco chorras al hacer esta afirmación (y, posiblemente, estéis en lo cierto) y que lo que hago aquí es, simplemente, buscarle cinco pies al gato. Pero permitidme que me explique y, después, ya me diréis.
Por supuesto que cualquier sumis@ ha de contar con el hecho de que va a ser objeto de actos incómodos, dolorosos y humillantes y que, los mismos, generará sufrimiento a niveles y en esferas muy distintos. Pero se tratará de “castigos consensuados”, siempre con opción a ponerles fin si se da la circunstancia, y que serán aplicados sin acritud o ensañamiento. No hay lugar para la rabia impulsiva o la ira descontrolada dentro de una relación bdsm (ni de ningún tipo). Por eso yo al “castigo” prefiero llamarlo “aleccionamiento”; además de por lo expuesto más arriba, por otra razón que os quiero desvelar.
Hay quienes contemplan la aplicación de tormentos sobre sus sometid@s como si fuera la meta en sí del bdsm y nada tengo que objetar a este hecho, ya que, cada cual tiene su propio punto de vista. Pero, para mí, la sumisión no supone, únicamente, dejarse hacer y, por lo tanto, el “castigo” supone un medio y no un fin. Es una herramienta igual que lo son un lápiz y un papel cuando nos ponemos a escribir. Nuestr@s sierv@s son la hoja en blanco que espera ser impresa y los correctivos a los que se someten son el instrumento mediante el cual dejar nuestra impronta. Las enseñanzas de las que se hacen depositarios se sirven del dolor, sí, pero este solo supone una parte de la entrega.
No quiero extenderme más pues, a buen seguro, querréis dar vuestra opinión a este respecto y, sin duda, irán surgiendo nuevos enfoques en referencia a este tema.
Solo una cosa más antes de terminar.
Como nuestra vecina dánae anda con la moral un poquito baja, y como fue precisamente ella la que llamó mi atención sobre este asunto, quisiera dedicarla este post.
Un abrazo a tod@s y uno especialmente grande para ti, dánae.
Si que es un Dominante atipico...seguire su blog..
ResponderEliminarEn cuanto a los castigos aveces son placenteros para la sumisa;)
un saludo
nectar
Mi querido Qarpatian...me siento completamente ruborizada por tu dedicatoria...no se que he hecho para merecer esta deferencia, pero puesto que me han enseñado a disfrutar de los regalos...no me plantearé mas....tan solo disfruto y te doy las gracias...
ResponderEliminarTambién, como mínimo dar mi humilde opinión al respecto...
Para mi el castigo, aunque si prefieres le llamo correctivo, que a mi me gusta mas....es eso...un acto que se acuerda para corregir una actitud no adecuada.
Evidentemente cualquier correctivo conlleva dolor, pero también pasión al entregarse a él, y esperanza al saber que se te aplica con un fin, es porque se espera una mejora...porque se confía en ti...
No suele ser fácil para mi en un primer momento, por mi orgullo, aceptar el correctivo, pero una vez asumida la culpa, la entrega a él, es una experiencia completamente enriquecedora.
Quizás suene como una loca, pero también me produce placer, sobretodo superar el correctivo y ver en el Dueño la satisfacción al haberlo superado.
Cierto es que ayer no estaba muy animada, pero con regalos como estos, cuesta mucho no sentirse mejor....y ahora...creeme que me siento mejor...
sonrio y agradezco tu detalle.
Un abrazo
Un castigo deja de ser efectivo si el fin es simplemente la satisfacción del Am@...hay quien se lo plantea así y busca por todos los medios las cinco patas al gato con tal de alcanzar ese estado de sadismo, también es obvio que hay sumis@s que encuentran un placer excesivo en ellos...yo creo que el sentido del castigo es adquirir mayor experiencia y agarrarse de la mano con mucha mas fuerza.
ResponderEliminarUn beso, un tema interesante.
Será un placer tenerte por aquí; nectar.
ResponderEliminarBienvenida.
¿Cómo no voy a tenerte presente, dánae, si eres la más asidua visitante de esta urbe?
ResponderEliminarSolo te hago partícipe de lo que tú misma vas cultivando.
Sobre los "correctivos" ¿no has pensado en que, a veces, puedan aplicarse aunque no parezca existir una causa que los justifique? ¿Qué puedan servir, en un momento dado, como un ejercicio?, ¿como un reto destinado a conocer el grado de tesón y de entrega (tanto física como emocional) que se está dispuesto a alcanzar?
Ya me contarás.
Lo dicho. Animo y un besazo.
Gracias, minerva, por tú puntualización.
ResponderEliminarNo hay duda de que, aquell@s que se someten, contemplan este tema desde una óptica bien distinta aunque, también, varíe en función de la persona.
Yo creo que, mediante los "castigos" (me he olvidado de mencionarlo antes)también se contribuye a estrechar el vínculo entre dominante y sometido, siempre y cuando, eso sí, se preste atención a los efectos, reacciones y consecuencias que acarreen los estímulos que se hayan estado proporcionando.
Todo un placer poder contar con tus opiniones.
Un beso para ti también.
Buenas noches....si he pensado en ello, la verdad....incluso aunque a minerva creo que no le parece bien este concepto, a veces lo busco simplemente por placer, ya sea del Dominante, o mio propio, pues...debo ser sincera y decir que según como, los castigos pueden ser tremendamente excitantes...y el vinculo que se crea con quien te lo aplica es excepcional....mmmmm
ResponderEliminarAunque no olvido que el principal motivo para mi es la corrección de una actitud, también me gusta cuando al Amo le apetece castigarte y sin necesidad de excusa o motivo, se castiga...entonces disfruto mas de él, (aunque otras me revele)...Si se que el castigo es con motivo, el sentimiento es más duro, pues es más real...
Pero bueno....en cuestión de sentimientos nadie puede meterse...cada uno siente de una manera, y siempre son respetables...pues yo deseo que me respeten a mi...
Y dejo ya de enrollarme que...mi impulsividad me suele jugar malas pasadas y hablo demasiado
felices sueños.
Perdón si entro a debatir donde no me llaman, pero dánae, no es me parezca mal, no, en serio no es eso, es que creo que no hablamos de los mismos castigos, una cosa es un juego, un tira y afloja entre ambos y otra muy distinta es recibir un correctivo por una mala actitud..., de todos modos mi palabra es evidente que es no es dogma de fe :) y que cada relación es un mundo en el que solo dos caben.
ResponderEliminarBesos y gracias por la oportunidad de poder tener tan interesantes palabras.
Considero que no es lo mismo un castigo que un correctivo, aunque sean sinónimos.
ResponderEliminarUn castigo puede ser una simple excusa para comenzar un juego entre ambos, o para satisfacer los deseos del Dominante.
Un correctivo siempre implicará una falta, la enmienda de ella, la reflexión y el perdón. Y nunca será agradable.
Claro, ésta es solo mi opinión.
Por supuesto, dánae, que el sometimiento siempre aporta cosas a quien se somete (¿qué sentido tendría sin no?), pero no siempre serán las deseadas ni las que se esperan en un momento dado. De hecho, pocas veces será así.
ResponderEliminarEn esto, el bdsm, no difiere demasiado de cualquier otra experiencia vital.
Un besito.
No será un dogma de fe, minerva, pero yo lo comparto al cien por cien. Siempre, eso sí, se exponga desde el respeto como tú haces.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus aportes.
Un besazo.
Sabía que este post iba a traer cola, haydée, ya que, sobre este tema, exiten opiniones muy particulares y, en ocasiones, enfretadas.
ResponderEliminarComo tú muy bien dices, hay que andarse con mucho ojo a la hora de utilizar uno término u otro si no se quieren herir suceptibilidades.
Un placer tenerte por aquí.
Un beso.
vaaaaaaaaaleeeeeeeee....me lo apunto en mi libretita de temas pendientes de aprender....está tan llena ya!!!tendré que volver a repasarlo todo.....un abrazo y gracias por todo lo que me aportas tu y tus visitantes...me encanta!
ResponderEliminarTampoco te lo tomes como inamovible y absoluto, dánae.
ResponderEliminarTan solo, mantén tú mente abierta sin obcecarte en ti misma y sin dejarte obcecar por los demás.
Descubre, valora, sopesa y decide.
Un beso, hiperactiva.
Gracias Qarpatian por tus palabras...me hacen pensar y eso me gusta...
ResponderEliminarUn abrazo.
Espero que te hagan pensar en cosas positivas dánae.
ResponderEliminarA mí tambín me gusta poder contar con tus palabras en este sitio. Sabes que siempre serán bien recibidas.
Un besito.