Rincón atrincherado.
No pretendo resultar pesado ni,
tampoco, echar mano constantemente al socorrido recurso de ponerme a hablar del
tiempo. Pero…, vistas las actuales condiciones; al menos por estos contornos;
se hace bastante difícil pensar en otra cosa que no sea huir de la intensa canícula
que tan repentinamente nos ha sobrevenido.
Urge en todo momento buscar un
lugar a resguardo donde poder continuar; en la medida de nuestras
posibilidades; con nuestras acostumbradas rutinas sin exponerse a sufrir
repentinos desvanecimientos. Así que…, sin ánimo alguno de resultar un
incordio; si os estáis viendo inmersos en circunstancias similares; insisto en
sugeriros que os pongáis a resguardo.
Que disfrutéis todos de una
feliz, y “guarecida”, jornada de
domingo.
Reconozco que me ha encantado por la sencillez y la luz que desprende. Me sugiere un dulce despertar bien temprano, cuando la luz empiece a invadirnos y nos podamos dedicar con calma el uno al otro...
ResponderEliminarBesines dulces
A Tus pies