Deshonra "formal".
Hoy voy a intentar aproximarme a
cierto término qarpadio un tanto peliagudo y sobre el que resulta bastante difícil
ofrecer una traducción fidedigna que no dé lugar a confusión. Se trata del
adjetivo “gleip” que vendría a definir la actitud resuelta y desenfadada
que; exenta de fingimientos y/o dobles intenciones; muestra cada persona hacia
los demás.
Tal vez el vocablo de origen
anglosajón “cool” sea uno de los que
más se aproxima al contexto que pretende describir la palabra a la cual me
estoy refiriendo (aunque centrándose únicamente en aquellos aspectos de carácter
más personal y no en esos otros de índole más idealizada o estética).
Podría decirse que es como contar
con un cierto grado de “carisma”
aunque sin llegar a convertirse en ningún tipo de referente o a sobresalir de manera
ostensible sobre el resto. Viene a definir, simplemente, esa autenticidad
honesta e innata que todos somos capaces de trasmitir cuando prescindimos de “formulismos” y obramos según nuestros
propios valores, sin pretender aleccionar más allá del propio ejemplo que
promovamos.
Comportarse de cualquier otro
modo supone para los qarpadios uno de los mayores oprobios en los que puede incurrir
una persona y, por consiguiente, una deshonra en toda regla.
Ojalá todos nos mostraramos como en realidad somos, pues tanta impostura nos convierte en seres aun mas complejos y desconfiamos asi hasta de nosotros mismos, creando unas tensiones innecesarias que acrecientan nuestros temores y convierten al mundo en un lugar cada vez mas inhabitable, necesitando con mas asiduidad desconectar de esta realidad que nos atrapa y nos engulle.
ResponderEliminarCuando nos desnudamos de esos formulismos, cuando nos descuidamos y somos auténticos descubrimos que esa genialidad no es reprochada sino que incluso agrada por su ligereza.
Ahora mismo estoy rodeada de mucha de esa impostura y pensamientos ocultos que crean un ambiente intoxicado y me esfuerzo para no contagiarme en ser gleip pues sé qur nada tengo que perder yo y si en cambio a los que no me aceptan.
Asi deberia ser en todos los rincones pero me alegro de que por lo menos en este rincón sea posible y apreciado.
Besines dulces
A Tus pies
No me gustan las etiquetas, de postureos por el ser lo que no se es, tal vez sea por que vivimos rodeados en un mundo muy artificial, donde la apariencia se lo lleva todo.
ResponderEliminarAunque sea a contracorriente, hay que ser uno mismo. A quién le guste bien, a quién no... también pero no cambiar por la aceptación ante los demás... o por las corrientes preestablecidas.
Todo tiene un orden, un ser, un por qué... y, lamentablemente, se neecsita recuperar los valores perdidos.
A usted se le ve sin pelos en la lengua y eso me es grato.
Gracias por dejar vislumbrar sus pensamientos sin tapujos.
Mis saludos y estupendo fin de semana, Caballero.