Rincón accidental.
Cuando las cosas no nos vienen de
cara, podemos actuar de dos maneras: dejarnos llevar por el desánimo y
permanecer bloqueados mientras nos lamentamos de nuestra escasa fortuna o
procurar sacarle todo el provecho posible a cualquier mínima opción que se nos
presente para tratar de revertir -o, al menos, minimizar- nuestros pesares.
A veces, sin grandes alardes se obtiene
un gran beneficio. A veces, lo más sencillo nos colma y nos brinda fuerza.
Que disfrutéis todos de una muy
feliz, y “provechosa” jornada de
domingo.
Todo depende de uno mismo, eso cierto.
ResponderEliminarGracias e igualmente para usted.
Mil besitos.