Necesidades.

 


En esas ocasiones

en que no habla el cuerpo

sino el alma,

y suplica entre sollozos

verse rendida a la causa

de un desenfreno abrupto

que la limpie de la angustia

que ya lleva acumulada,

cedes ante un poder vigoroso

que te quiebra sin dañarte.


Te sumerges sin tapujos

en el total abandono

mientras se adentra, algo rudo,

el ariete que derrumba

los muros del desaliento

dejando libre el camino

a un laberinto perfecto

donde perderse sin pausa

y encontrarse siempre a tiempo.


Dejas atrás tus miserias

y te sientes conmovida

dejando que broten saladas

las lágrimas retenidas

por tanto tiempo encerradas.

Comentarios

  1. No temas ni te aflijas, mi Señor, porque esa también es una forma de entregarte cuanto soy, de exponer una verdad que pocos merecen.

    Depósito en Tus manos un cuerpo deseoso y una mente que se siente libre para expresarse sin tapujos.

    De vez en cuando, así hablo, en el silencio que aguarda ser roto entre gemidos, entre la pasión sin freno que encuentra Tu consuelo.

    Me conoces mi Señor y en Ti confío.

    Besines dulces
    A Tus pies.

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    Respuestas
    1. Confianza construida en ambos sentidos y..., por ello, sentida en compartida plenitud.

      1b y 1a mi dulce, y "convergente", sierva.

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