Agitadores de conciencias.

 

No es algo exclusivo de Qarpadia, pero existen lugares, situaciones, personas, que nos descolocan del todo pero... para bien.

De inicio nos dejan sin argumentos, sin capacidad alguna de ejercer una réplica pues, es tal el grado de desconocimiento en relación a lo que nos plantean, que no sabemos muy bien cómo enfocarlo a través de las herramientas que nos han ido proporcionando nuestras propias experiencias.

Seguidamente nos dejan envelesados, hipnotizados por ese desconocido y atrayente influjo que emana de una línea argumental alternativa que sugiere toda una serie de nuevas opciones. Podían habérsenos ocurrido a nosotros mismos, vistas en perspectiva resultan lógicas y evidentes, pero nunca antes se nos habían pasado por la cabeza.

Finalmente, como si de una revelación se tratase, nos abrimos a ese nuevo mundo que se nos muestra y nuestra mirada cambia ya para siempre. No existe vuelta atrás. Casualmente..., o no, el germen conceptual que plantean esos nuevos horizontes arraiga en nosotros de forma irreversible y nos cambia por dentro. Crecemos, evolucionamos..., nos elevamos sobre nuestro yo anterior y somos capaces de disfrutar de todo cuanto se puede ver gracias a nuestra recien estrenada amplitud de miras.