Freedom.
Sé que, por estas latitudes, este
nombre no os dirá gran cosa, pero si dejara caer el dato de que fue él el
encargado de abrir el, ya mítico, Festival de Woodstock, seguro que resulta
mucho más fácil ubicarlo en su debido contexto. Aunque Richie Havens no estaba
llamado a inaugurar aquel certamen (en realidad aparecía el quinto en la lista
de programación) diversos avatares lo llevaron a encabezar el cartel. Su actuación
no iba a defraudar al entregado público que se había congregado aquel 15 de
agosto de 1969 en la granja de Bethel en el condado de Ulster (New York). Tal
fue así que agotó su repertorio y hubo de recurrir a innumerables bises para
contentar al respetable. Llegado un momento, no sabiendo muy bien a qué más
echarle mano, realizó una improvisación sobre un clásico del góspel titulado “Motherless Child” al que añadió como estribillo la palabra “Freedom”. Aquel instante pasaría a
recordarse como uno de los momentos cumbre del festival y el nombre de Richie
Havens a convertirse en uno de los iconos de la contra-cultura.
Mucho ha llovido desde entonces y,
ahora, Richie nos ha dejado, pero el eco de aquellas palabras; que dieron la
bienvenida a cerca de 400.000 personas; conservan aún la misma vigencia. Aquí
os las dejo para que vosotros mismos determinéis si estoy o no en lo cierto.
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
A veces me siento como un niño al que le falta su madre,
a veces me siento como un niño al que le falta su madre,
a veces me siento como un niño al que le falta su madre.
Muy lejos de mi hogar
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
Libertad
A veces me siento como si no estuviera,
a veces me siento como si no estuviera,
a veces me siento como si no estuviera.
Muy, muy, muy, muy, muy lejos de mi hogar.
Haz sonar tus manos,
haz sonar tus manos,
haz sonar tus manos,
haz sonar tus manos,
haz sonar tus manos,
haz sonar tus manos,
haz sonar tus manos,
haz sonar tus manos,
oh ... sí
Llevo un teléfono en mi pecho
y puedo llamar desde mi corazón.
Llevo un teléfono en mi pecho
y puedo llamar desde mi corazón,
cuando necesito a mi hermano
cuando necesito a mi hermana
cuando necesito a mi padre
cuando necesito a mi hermana
cuando necesito a mi padre
cuando necesito a mi madre
Hasta siempre Richie.
Buah!! increíble!
ResponderEliminarNo lo conocía pero su voz me ha cautivado...
Es emoción pura en unas cuerdas vocales!
Buscaré mas sobre él...sin duda
Gracias por este homenaje que me ha dado la oportunidad de acercarme a él, aunque tarde...
Que descanse en paz, que sin duda habrá tenido una vida intensa.
Besines dulces!
A Tus pies
Sabía que te gustaría, mi sierva, pues; al igual que de ti; de aquella voz y aquel momento parece emanar una espontaneidad profunda, pura y sincera que desmonta los cimientos del convencionalismo.
EliminarPor desgracia, instantes así no se buscan... simplemente aparecen. Preparémonos para ellos y aprovechémoslos cuando se presenten.
CARPE DIEM.
Un beso y un azote.