Caminos interiores.
Oportunidad enmascarada
de aspecto poco
atractivo
viene a presentarse, a
veces,
cuando otras puertas
se cierran.
Lo que, en principio, rehúye
viene a mostrarnos su
cara,
deslucida en
apariencia
pero llena de
esperanza.
Como casona ruinosa,
desvencijada y
endeble,
luce aún el señorío
de un inspirado
arquitecto.
Así sucede, a menudo,
que el edificio del
alma,
aunque esté triste por
fuera,
por dentro sorpresas
guarda.
Una mano de pintura,
una limpieza esmerada,
unos retoques sencillos
y, esa casa, es
envidiada.
Por eso…, no
desechemos
de manera apresurada
lo que, con algo de
esfuerzo,
nos dota de tantas
gracias.
Cuando no vemos salida
y se acumulan temores
es momento de dar vida
a caminos interiores.
Pocos son los que ven mas allá de la apariencia agrietada de un alma desterrada,
ResponderEliminarmenos los que viendo su poca valía se adentran a descubrir las verdades que oculta y.
casi ninguno, confía en la recompensa a ese esfuerzo. Por eso, encontrar en esta senda alguien dispuesto,
no solo a despertar la adormecida esencia de una inerte alma, sino a acompañar, guiar, ser pilar y luz en este camino interior, es el mayor regalo que se puede recibir.
Yo he renacido entre Tus brazos y deseo continuar descubriendo nuestros caminos interiores, compartiéndolos y disfrutándolos...Tu eres quien me ha dado la oportunidad, eres mi arquitecto, y en mi interior quiero siempre sentirte.
Precioso texto que dice mucho más de lo que las palabras muestran...gracias mi Señor
A Tus pies
Si dice más de lo que parece es, ni más ni menos, porque lo hay. Poco mérito, entonces, por mi parte, pues tan solo me limito a constatar una realidad.
EliminarUn beso y un azote, mi dulce sierva.