Provincias.

 

Generalmente, lo primero que a muchos se les pasa por la cabeza cuando se habla de Qarpadia es la febril actividad que puede observarse en sus núcleos de población más importantes, el dinamismo de sus gentes y el eclecticismo y variedad de estilos que conforman esos pequeños universos metropolitanos. Si bien todo esto es verdad, no es menos cierto que la nación invisible tiene mucho más que ofrecer a todos sus potenciales visitantes.

Si nos aventuramos a conocer qué es lo que esconden todas esas zonas de interior alejadas del bullicio de la ciudad, descubriremos una insospechada diversidad de paisajes rurales, un surtido catálogo de arquitecturas cambiantes, un riquísimo folclore, así como algunas de las más increíbles joyas naturales que uno podría imaginar.

Si bien la esencia de sus gentes no difiere demasiado de la del resto, el "tempo" que imprimen a todo lo que hacen resulta un tanto más sosegado. Con independencia de a dónde se orienten nuestros pasos, tendremos la oportunidad de disfrutar de la serenidad que transmiten esas tierras, mientras nos vamos aclimatando a las nuevas propuestas que vayan surgiendo.

Conforme se va saltando de una localidad a otra, uno se percata de todas las sorpresas que nos puede llegar a deparar cada una de ellas. Esto, casi siempre, se acaba convirtiendo en un acicate más a la hora de viajar sin prisas, poniendo todos los sentidos en cuanto nos rodea, hasta el punto de llegar a convertirse, para algunos, en toda una forma de vida.

No sé si ese será el caso para muchos de los que estáis leyendo estas líneas pero..., sin duda, si en algún momento tenéis la oportunidad, os invito a sumergiros en el seno de tan bucólicas estampas.