Rincón distintivo.

 


Con algunos rincones pasa como con ciertas personas. Por algún motivo tienen algo que no nos acaba de convencer. No tiene porque tratarse de algo malo en sí mismo, simplemente no se llega ha conectar con ellos.

La diferencia entre un espacio concreto y una persona expecífica es que el primero lo adaptamos a nuestro gusto y asunto arreglado. A la segunda, por contra,  no se la debe forzar a que se amolde a nuestras preferencias porque sí (sobre todo cuando se trata de cuestiones que poco tienen que ver con la necesidad o el apremio y guardan mucha más relación con preferencias de orden mucho más superficial).

No todo tiene porqué gustarnos (como me sucede a mí con la propuesta estilística que os he traído hoy), pero eso no significa que tengamos derecho a obligar a los demás a que compartan la misma clase de predilecciones que nosotros.

Que disfrutéis todos de una muy feliz, y "tolerante", jornada de domingo.

Comentarios

  1. Pues justo cuando vi la imagen pensé que era extraño que hubieras elegido este rincón pues no me resulta nada atrayente, y conociéndote ya un poquito en gustos sobre estancias y decoración no me cuadraba.

    Sonreí al leer Tu texto y comprobar que no me equivocaba y justo eso es lo que exponías hoy.

    Un placer, como siempre, navegar por Tus pensamientos.

    Besines dulces
    A Tus pies

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me conoces ya demasiado como para que jugar al despiste contigo surta los efectos que, habitualmente, suelen esperarse.

      1b y 1a, mi dulce y "perspicaz" sierva.

      Eliminar
  2. Logramos ser entes adaptativos ante situaciones o lugares... pero con las personas nos cuesta gestionar por ese mismo motivo que has nombrado. Muy buena entrada para ejemplificar.

    Mil besitos y muy feliz comienzo de semana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mil gracias Aurora.
      Me alegra que te haya gustado.

      Feliz y provechosa semana. 🌹

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares