Cuando el diablo se esconde en los detalles.

 


Un error tonto, una omisión, un descuido. Muchas veces no le damos importancia pues confiamos en que los demás sabrán identificar claramente lo que es obvio. Pero un pequeño cambio, por insignificante que parezca, a la postre, puede suponer una gran diferencia.


Comentarios

  1. Es fácil confundirse con según que detalles, pero muchas veces también ocurre porque quien debe entender se preocupa muy poco por comprender y muy mucho por aprovechar la oportunidad a su favor.

    Variadas intenciones hay por ahí y muchas demasiado ocultas...o seré yo, mi Señor??

    Besines dulces
    A Tus pies

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    Respuestas
    1. En absoluto, mi sierva (o, al menos, así lo entiendo yo). No es posible despistarse ni por un momento porque, si no, incluso aquellos que parecían ser los más tontos, sacan rápidamente provecho de nuestros tropiezos.

      1b y 1a.

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